Durante los últimos seis años, la CIIE se ha convertido en un evento importante de la apertura de alto nivel de China y un símbolo de los esfuerzos continuos de China para construir una economía global abierta.
La séptima edición de la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE) comenzó el martes y ofrece a países y empresas de todo el mundo una enorme plataforma para exhibir sus productos y servicios y una valiosa oportunidad para acceder al vasto mercado de China.
Además de la exposición nacional con temática de importaciones, China anunció recientemente una serie de iniciativas para abrir más sus puertas a visitantes, inversores y empresarios extranjeros, incluida una política ampliada de exención de visas y una flexibilización de las restricciones a la inversión.
A medida que el país avance con su política abierta de alta calidad, se espera un enorme aumento en el comercio global, la inversión y los intercambios entre pueblos.
La CIIE de este año, que se celebrará del 5 al 10 de noviembre en Shanghai, China, reunirá a participantes de 152 países, regiones y organizaciones internacionales, con la participación de un récord de 297 empresas Fortune Global 500 y líderes de la industria. a la creciente influencia internacional y al atractivo del evento.
El evento demuestra el claro compromiso de China con la expansión de las importaciones y la promoción de la liberalización comercial. También servirá como plataforma para que China introduzca nuevas medidas para mejorar el entorno empresarial para las empresas extranjeras, desde flexibilizar las políticas comerciales hasta apoyar el comercio electrónico transfronterizo y simplificar los procedimientos aduaneros.
Durante los últimos seis años, la exposición anual se ha convertido en un evento importante de la apertura de alto nivel de China y un símbolo de sus esfuerzos continuos para construir una economía global abierta.
A través de la exposición, China firmó acuerdos comerciales por valor de miles de millones de dólares y abrió su mercado interno a una amplia gama de bienes y servicios extranjeros, beneficiando tanto a los consumidores nacionales como a los proveedores globales.
Un compromiso con la prosperidad común y la globalización económica convierte a la CIIE en un contribuyente clave a la estabilidad económica global y en un motor para el comercio y la inversión transfronterizos, especialmente en un momento en que el comercio global está plagado de incertidumbres y presiones proteccionistas.
China también está tratando de facilitar mucho las visitas de turistas y empresarios extranjeros. A partir del 8 de noviembre, los ciudadanos de Eslovaquia, Noruega, Finlandia, Dinamarca, Islandia, Andorra, Mónaco, Liechtenstein y Corea del Sur con pasaportes ordinarios podrán viajar a China sin visa.
Esta medida, junto con otras medidas favorables a los visitantes, promete impulsar aún más las llegadas de extranjeros. En el tercer trimestre de este año, China registró una entrada de 8.186 millones de extranjeros, de los cuales 4.885 millones estaban libres de visa, lo que representa un aumento del 48,8 y 78,6 por ciento, respectivamente, respecto al año anterior.
Los gobiernos locales de China también están intensificando su oferta hotelera. En Beijing se lanzó el folleto “Bienvenidos a Beijing: Consejos importantes para recién llegados” con importante información turística; Shanghai ha equipado sus estaciones de taxis y de metro con dispositivos que aceptan tarjetas bancarias extranjeras. Centros turísticos como Chengdu y Xi’an también han adoptado nuevas medidas para que los extranjeros se sientan como en casa.
Recientemente se ha trabajado mucho para crear un entorno más favorable para los inversores extranjeros. Una nueva edición de la lista nacional negativa de China para la inversión extranjera, que entró en vigor el viernes, levantó las restricciones restantes sobre el sector manufacturero.
De esta manera, el país ha eliminado todas las barreras a la inversión extranjera en manufactura, lo que indica su liderazgo mundial en apertura manufacturera, especialmente porque algunos países desarrollados todavía imponen restricciones a la inversión manufacturera extranjera.
Como han señalado muchos expertos, la continua apertura de China será una gran ayuda para el resto del mundo, estimulando una recuperación económica global, especialmente en medio de un panorama internacional turbulento y en evolución.
Xinhua